Lo que deben saber acerca de la frenectomía

Cuando se piensa en la salud bucodental, usualmente se cree que está determinada por los hábitos de cuidado y limpieza, no obstante, depende en gran medida de aspectos hereditarios. Un ejemplo de ello nos lo muestran los frenillos bucales. Consisten en varios pliegues de tejido fibroso y muscular que se encuentran debajo de la lengua y en las uniones de la encía con el labio. Su presencia no debería suponer un problema, pero, en algunos casos, requieren la atención de especialistas en odontología en Medellín.

Los frenillos bucales causan molestias y algunas patologías, por ejemplo, problemas para hablar, aparición de un enlace interno conocido como diastema o dientes mal alineados. Los problemas varían según el tipo de frenillo presente, pero, en cualquier caso, se requiere un tipo de cirugía oral en Medellín conocido como frenectomía.

¿En qué consiste la frenectomía?

Como mencionamos, se trata de un procedimiento quirúrgico de mínima invasión y relativamente sencillo, aunque es necesario que se realice por un experto en odontología en Medellín. Permite extirpar el frenillo sublingual o bucal, eliminando así los inconvenientes estéticos y de pronunciación que conllevan. Se lleva a cabo con anestesia local y toma poco tiempo, además la recuperación es muy rápida, permitiendo que se incorporen casi de inmediato a sus actividades.

Es importante que los niños visiten regularmente al odontólogo para detectar el problema, siendo la frenectomía una intervención que se efectúa habitualmente en ellos, aunque igual hay adultos que pueden requerirla.

¿Cuándo se recomienda la frenectomía?

Esta intervención se indica cuando el frenillo dificulta el movimiento normal del labio superior, lo que no solo es molesto para los pacientes, sino que dificulta que se comuniquen o pronunciar ciertos sonidos. Lo mismo ocurre cuando el frenillo se encuentra debajo de la lengua. Igualmente, se recomienda cuando hay diastema dental (que es importante corregir), es decir, dientes separados con amplios espacios, principalmente en incisivos centrales superiores, causados por una hipertrofia en el frenillo labial.

Se sugiere esta cirugía mínima cuando ya se tienen todos los dientes definitivos, ya que puede corregirse el problema cuando se caen los dientes de leche. Cabe agregar que la intervención se recomienda en adultos que usan prótesis dentales y en las que el frenillo causa problema con estas, por ejemplo, irritaciones en la zona entre el frenillo y la prótesis a causa de la fricción.

¿Qué tipos de frenectomía hay?

Según la ubicación del frenillo, hay dos tipos:

Frenectomía sublingual

Se realiza cuando el frenillo ocupa mucho espacio en la base de la lengua, impidiendo que esta se mueva adecuadamente y otras funciones, como la succión y la deglución. Es una patología frecuente en menores de edad, aunque se recomienda cuando ya se han caído los dientes de leche, debido a que el grosor de los frenillos tiende a reducirse de manera progresiva.

Frenectomía labial

Existen dos frenillos labiales: uno inferior y el otro superior. Antes de realizar la cirugía, el experto en odontología en Medellín evalúa el caso para determinar cuál es el causante de los problemas. Como mencionamos el frenillo hipertrófico causa diastema, lo que no solo afecta la estética de los dientes, sino que aumenta los riesgos de caries y otras complicaciones. Si se encuentra en la parte inferior, se detecta un pliegue que limita el movimiento del labio.

¿Cómo se realiza la cirugía?

Como mencionamos, es una intervención rápida y sencilla. El procedimiento toma menos de media hora y bajo anestesia local, permitiendo que el paciente se retire sin problema. El primer paso es realizar un diagnóstico detallado del paciente, considerando su edad, las molestias que causa el frenillo, la etapa dental, entre otros aspectos. Para la frenectomía lingual, se hace una incisión pequeña para separar la lengua del suelo bucal, permitiendo así mayor movilidad.

En caso de que exista un frenillo labial, se corta y extirpa para que los dientes puedan juntarse y los labios tengan mayor movilidad. Las incisiones se efectúan con un electrobisturí o con láser y bajo condiciones asépticas. Solo en algunos casos se sutura la herida para cerrarla.

¿Cuáles son los cuidados postoperatorios?

Los cuidados requeridos son mínimos, ya que la incisión es muy pequeña, llegando a cicatrizar en una o dos semanas aproximadamente. Pese a ello, hay algunas acciones recomendadas tras la intervención, como:

• Evitar los alimentos hasta que haya pasado por completo el efecto de la anestesia.
• Después de seis horas, deben evitarse los alimentos muy calientes o fríos, asimismo, que estén ácidos o con muchas especias. De esta manera se evita una mayor inflamación en la herida.
• Eviten introducir objetos en la boca, a menos que estén esterilizados. Los niños suelen hacer caso omiso a esto, por lo que los padres deben estar atentos en los siguientes días y recordarles las posibilidades de una infección.
• La higiene es de suma importancia. Cada vez que consuman un alimento, deben cepillarse los dientes. En caso de que se haya realizado la cirugía en niños pequeños, los padres pueden usar clorhexidina, aplicarla a una gasa y pasarla por sus encías.

Si bien es una intervención mínima, hay riesgos, como necesidad de correcciones, por lo que es importante acercarse a odontólogos en Medellín con amplia experiencia. En DentiOral los encontrarán. Soliciten una cotización o más información a través de la línea 604 444 8911 o completen con sus datos el formulario en nuestro sitio web.